Vamos a descubrirlo.
1. No es un arquitecto, no es un ingeniero: es algo más
Cuando alguien escucha "consultor de edificios", a veces piensa que es lo mismo que un ingeniero civil o un perito. Pero no. Un consultor de edificios es un especialista que analiza el estado físico, funcional y legal de una construcción, especialmente después de un siniestro.
Su trabajo no es construir, sino entender profundamente el daño, saber cómo se afectó la operación del edificio y qué pasos seguir para restaurarlo correctamente.
2. Evaluación completa del daño (más allá de lo obvio)
Después de un desastre, es común ver grietas, filtraciones o zonas quemadas. Pero hay daños que no se ven a simple vista: estructuras debilitadas, problemas eléctricos ocultos, sistemas que dejaron de funcionar.
Aquí es donde entra el consultor. Evalúa cada rincón del edificio, revisa planos, hace pruebas técnicas y prepara un informe completo. Esta es una de las razones por las que es tan común la pregunta ¿qué es un consultor de edificios? cuando alguien se enfrenta a una pérdida grande.
3. El puente entre tú, los técnicos y las aseguradoras
Una parte muy valiosa del consultor es que traduce lo técnico a lo práctico. Te dice qué puedes recuperar, qué debes demoler, cuánto va a costar y cuánto podrías reclamar al seguro.
Además, ayuda a coordinar arquitectos, ingenieros, contratistas y peritos, para que todos trabajen con una misma visión. Es decir, alguien que pone orden cuando todo parece un caos.
4. ¿Cuándo deberías buscar uno?
Cada vez que hay un daño significativo en un edificio —ya sea por fuego, agua o terremoto— es buena idea contactar a un consultor. También si estás por comprar o vender una propiedad comercial, o si tienes dudas sobre la seguridad de tu inmueble.
Así que la próxima vez que alguien te pregunte ¿qué es un consultor de edificios?, ya sabrás que es ese aliado clave que puede salvar tu inversión y ayudarte a tomar decisiones inteligentes cuando más lo necesitas.